Dios está buscando almas comprometidas. Obreros, guerreros de primera fila. Personas comprometidas a hacer crecer el Reino. A ir en busca de las almas. A arrebatarle las almas al enemigo.
Pero para eso, hay que tener una actitud comprometida, comprometida con la oración diaria, con el ayuno, con la Adoración al Santísimo, con la confesión, con la Misa (si es posible diaria)
Se requiere una vida de santidad e integridad. ¿Como vas a querer pelear con el demonio si estás sucio?.
¿Querés ser realmente un servidor de Cristo? Revisá tu vida, fijate por dónde vas, cuáles son tus prioridades. ¿Es el Señor el centro de tu vida? ¿ Lo pusite a Él en primer lugar? ¿Cuáles son tus intereses? Cuando todos salen a "divertirse", a emborracharse, etc ¿vos que haces?. Esto es un tema de decisiones.
Si vas a servir a Cristo, cuidá tu camino, o sino serás de mal ejemplo.
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