Dios es fiel, Él siempre cumple sus promesas. ¡Siempre! Dios, es Dios de Palabra, nunca falla, aunque parece que tarda, Él nunca tarda, llega a la hora indicada, ni antes, ni después. Viene en el momento ya fijado por Él.
Para todo tiene un propósito y un porqué.
¿Quién dijo que la vida es aburrida?
Con Dios no hay tiempo para el aburrimiento, sólo basta decir sí y comenzás a emprender una aventura, una aventura donde estarás cautivo, preso, deportado. Viajarás por el desierto, caminarás sobre las aguas, lucharás con gigantes, con principados y potestades. Te enfrentarás al enemigo y saldrás victorioso.
Vale la pena pagar el precio, vale la pena someterse al proceso, al fuego purificador, vale la pena salir de Egipto, atravesar el desierto y en la mitad, querer volver atrás, enojarte con Dios y decirle que antes estabas mejor, cruzar el Jordán, llegar a la Tierra Prometida, luchar con gigantes y expulsarlos. Y comenzar a ver y vivir en el cumplimiento de las promesas. ¡VALE LA PENA!, esperar.
Dios siempre llega a tiempo, en la espera te prepara, te entrena, te purifica, aumenta tu fe, tu confianza y va cambiando tu imágen de Dios. Te enseña a luchar, te da estrategias, consejos, direcciones. Nunca estás solo.
Todo tiene un plan y un propósito.
Cuando Dios te da una promesa, ¡La cumple! Y aunque tarde en llegar, esperala, en su momento va a llegar:
Porque es una visión con fecha exacta, que a su debido tiempo se cumplirá y que no fallará; si se demora en llegar, espérala, pues vendrá ciertamente y sin retraso.
Habacuc 2,3
DIOS ES FIEL, ÉL CUMPLE SUS PROMESAS.
Esto que Dios hizo conmigo, también lo puede hacer con vos. Solo tenés que creer, poner a Dios en primer lugar, y comenzar la aventura.
Cuando ponés a Dios en primer lugar... ¡TU VIDA CAMBIA!.
El que se sienta en el trono declaró: "Ahora todo lo hago nuevo"
Apocalipsis 21,5